La superación de la doble pobreza de las mujeres víctimas de violencia de género. Innovación y oportunidades para el empleo

Hay muchos análisis que abordan el problema de la violencia de género y sus consecuencias para las mujeres. La pobreza económica y social, constituye una parte importante de estas consecuencias. Frente a esta realidad, varias organizaciones están trabajando en la implementación de medidas para la inserción laboral y social de mujeres que se encuentran inmersas en este tipo de pobreza debido a la violencia de género que han sufrido. El objetivo principal de este workshop consiste en presentar el análisis de las medidas implementadas por la administración pública en la comunidad autónoma del País Vasco, así como su influencia en relación a la superación de la situación de pobreza y exclusión que viven estas mujeres. De la misma manera, se dará especial importancia a las propuestas del recién aprobado Pacto de Estado en materia de Violencia de Género mejoran o modifican estas situaciones. En este sentido, el presente workshop significará una aportación novedosa al tratar las últimas contribuciones, tanto de la ciencia como de la sociedad, en términos de mejoras y limitaciones del Pacto.

A través de personas miembros de organizaciones del tercer sector y víctimas directas de la violencia de género, se presentarán experiencias de primera mano para la mejor comprensión de la situación de la pobreza socioeconómica que sufren las mujeres víctimas de violencia de género, así como las medidas adoptadas por la administración pública para responder a esta situación. Las narraciones de las mujeres y de las personas que día a día trabajan con ellas, son claves para enmarcar la medida en la que estas acciones son útiles para ellas, señalando también las recomendaciones de mejora que ellas proponen, tanto a nivel laboral, económico, como psicológico y social. El análisis de esta realidad, llevada a cabo en contacto directo con las agentes sociales, arroja luz no solo sobre las novedades en materia de políticas de reintegración en el contexto de la doble pobreza causada por la violencia, sino también sobre aquellas medidas que hayan demostrado tener más éxitos a la hora de enfocar dichas medidas y su superación.

En este sentido, la comunidad autónoma del País Vasco muestra un modelo de acción integral único que puede ayudar a abordar las situaciones que las mujeres víctimas de violencia de género sufren; centrándose en dimensiones sociales como el empleo, la educación, la salud, la vivienda y el empoderamiento social. En este sentido, el análisis de la situación de las mujeres y de la forma de superarla se pretende analizar principalmente desde dos dimensiones: barreras (elementos que dificultan la inserción de mujeres víctimas de violencia de género) y facilitadores (acciones o mecanismos que sirven para superar estas barreras). La base metodológica del análisis se enmarca de lo que se conoce como metodología comunicativa, ya que se caracteriza por dar importancia a la voz de las personas que han sufrido de primera mano la realidad estudiada, con el objetivo de transformarla. Por este motivo, al contar con la voz de las personas end-users, nos centraremos especialmente en los aspectos positivos, en aquellos elementos que ayudan a transformar los problemas que sufren las mujeres en estas situaciones. El análisis será presentado en base a los siguientes indicadores: 1) empoderamiento, empleo y capacitación de las mujeres; 2) apoyo y trabajo en red; 3) compromiso de las organizaciones y colaboración entre las entidades; 4) modelo de acción integral. Las diferentes mesas redondas contaran también con expertos y expertas que de forma complementaria desarrollaran las medidas proporcionadas en el Pacto de Estado en materia de Violencia de Género, en relación a la situación de las mujeres víctimas de pobreza económica e inestabilidad social.

Cuando la investigación reconoce que estas mujeres dependen económicamente y socialmente de sus maridos, en realidad, está reconociendo que una separación de sus esposos significaría no solo un empeoramiento de su situación económica sino también una brecha social y una pérdida de trabajo en red. Está claro que una de las consecuencias de la violencia de género es la pobreza. La ausencia de oportunidades laborales es uno de los problemas que las mujeres deben cubrir, sin embargo, su baja autoestima, el hecho de haber abandonado la educación, la falta de apoyo y, en consecuencia, su falta de empoderamiento, les lleva a darse cuenta de que es necesario superar un proceso difícil para conseguir una inserción. Por esta razón, lo que también necesitan es empoderamiento, apoyo, ayuda y compromiso en este sentido. En resumen, lo que pretendemos abordar es una doble victimización sufrida por mujeres víctimas de violencia de género. Debido a que son víctimas de la lacra social de la violencia de género, estas mujeres sufren una doble victimización. Más allá de ser víctimas, las situaciones de estas mujeres también están fuertemente marcadas después de abandonar la relación, mientras se enfrentan a todos los procesos que les vienen después. Escuchar, recibir y apoyar son a menudo las claves básicas que necesita una mujer en riesgo.